Las flores alegran mi ambiente, mi espacio y mi vida. Hablan por sí solas. Constituyen ejemplos magníficos de la belleza natural, al igual que las montañas, los ríos, las puestas de sol, y el mar. Sin embargo, muchas veces pasan desapercibidas. No son todas las mujeres, las que caen desmayadas al recibir un ramo de rosas rojas o un arreglo floral, eso debo admitirlo. Para mí el valor de una flor, se encuentra principalmente en el trabajo (siembra, riego, podas, fertilizantes, etc), amor y cuido que requieren antes de ser cosechadas (cortadas y empacadas). Nada se compara con una flor natural. Odio las imitaciones (ya sean de papel, plático o tela). Puede ser que debido a todo esto, los arreglos florales como obsequio, sean opción para pocos, por su alto precio. Por otro lado, el valor sentimental de las flores, depende de quien las obsequia o participa en el proceso de su siembra y cosecha. En esta época del año, ya podemos ver muchas flores; la disfruto como no tienen idea! Las fotogr
Comentarios
Saludos.
He encontrado tu blog y me ha encantado, ese toque cotidiano de la vida que la damos por sentado a veces. He agregado tu blog en el mio (janpedrano.blogspot.com)
Espero que te recuperes completamente.
Un abrazo.