Puede sonar pesimista el título de este "post", ya que hará pensar a muchos sobre la imposibilidad de llevar un matrimonio hasta que la muerte les separe. Hoy en día, es todo un reto y logro, celebrar 5 años de vida matrimonial por ejemplo. Sin embargo, mi intención es otra. Deseo hacer todo lo contrario, y exponer la posibilidad de que la unión matrimonial continúe vigente, incluso después de la muerte. Eso es lo que sucede en el caso de mi madre, quien después de haber enviudado desde hace más de 7 años, dice continuar casada con mi padre a quien ama entrañablemente.
Siempre recuerdo esta fecha 26 de septiembtre como una fecha especial: es el día de aniversario de bodas de mis padres. Estarían cumpliendo 44 años de casados. Llevo grabada en la mente la imagen de mi papá haciendo su brindis de aniversario y diciéndole a mi madre, con ojos llorosos, que volvería a casarse con ella en caso de volver a nacer. Por supuesto que esta es una de las tantas aristas del matrimonio, y sería ingenuo de mi parte, pensar que "mis viejos" no experimentaron duras pruebas de vida juntos, crisis matrimoniales, retos y desacuerdos. Quien tiene una idea sobre el matrimonio como un eterno cuento de hadas, quedará siempre defraudado.
Hoy quiero dar gracias por el matrimonio de mis padres, por los frutos de su unión, los cuales son muchos más que lo que pudieron haber imaginado.
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